Escucha este artículo

El sistema para el procesamiento de las Estadísticas Vitales en Chile es centralizado y lo integran tres instituciones: el Ministerio de Salud, el Servicio de Registro Civil e Identificación (SRCeI) y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

Este proceso pasa por tres etapas:

1. Recolección de datos a través de las inscripciones de defunción y codificación de la causa básica de muerte.
2. Validación y reclasificación de algunas causas de muerte para el cierre del año estadístico.
3. Publicación de las estadísticas vitales, en conjunto con INE y SRCeI.

La causa básica de defunción es seleccionada por una codificadora experta, en el Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS) del Ministerio de Salud, aplicando las reglas de la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud, Décima Revisión (CIE-10), con base en las causas de muerte reportadas en el Certificado Médico de Defunción (CMD). La calidad de las estadísticas de causas de muerte está ligada fundamentalmente al nivel de detalle de la información proporcionada por el médico, en el mencionado certificado.

En febrero de 2020 fueron informadas las recomendaciones de la OPS/OMS, de acuerdo con la CIE-10, para la clasificación de las defunciones por COVID-19, con el fin de generar las estadísticas respectivas, señalando dos clases:

“COVID-19, virus identificado” cuando el virus se haya confirmado mediante test de laboratorio y, “COVID-19, virus no identificado” cuando hay diagnóstico clínico o epidemiológico, sin pruebas de laboratorio disponibles. Estas definiciones fueron adoptadas de inmediato por el DEIS.

Como todos los años, una vez concluida la primera etapa de recolección y codificación de la causa básica de muerte, que da lugar a cifras preliminares, el DEIS inició el proceso de validación y reclasificación si corresponde, de las defunciones del año 2020. Para su ejecución se aplica todos los controles de calidad pertinentes a las variables de salud, demográficas básicas y de residencia habitual y revisando detalladamente de nuevo todas las defunciones cuya causa básica de defunción sea COVID-19, mediante cotejo de la base de datos de defunciones con otras bases de datos, que proporcionan más información que la que aparece en el CMD.